miércoles, 16 de enero de 2013

SHATOOSH



Me encanta ir por mi barrio y pararme a tomar una tapa y un vino para comer, y no tener que cocinar en casa, y como en la Plaza del Mercat hay tantos bares y todos buenísimos y con gente encantadora, ayer tomé unas tapas con una amiga en "EL AMOR DE MADRE" ante todo dar las gracias a Mariana, Paola e Igor, por lo atentos que son y lo fácil que lo hacen para sentirte como en casa.

 La verdad es que Palma está llena de gente genial, no sé porque dicen que los isleños somos un poco raros. Bueno ayer hacía frío y uno de mis chales favoritos y mas calentitos que tengo es  el shatush color caldero,  que en este caso, lo he colgado en el maniquí del bar, porque supongo que estaís hartos de verme.



Buenosi teneis paciencia os explico un poquito la historia de los shatoosh, para seguir la tónica de mis post, un shatush, viene de la palabra persa que significa "Placer de reyes", es un tipo particular de chal, en el tejido se utilizan las hebras del pelaje del antílope tibetano por los tejedores de Cachemira.

Originalmente existían muy pocos de estos chales, y su producción requería de artesanos muy hábiles para tejer los delicado pelos, (que poseen entre 9 a 11 microcentímetros). Eso los convierte en objetos precisoso. 

Los shatoosh son tan livianos que un chal de tamaño mediano pasa sin dificultad por una alianza de boda. 

El Chivi vive en condiciones extremas, a más de 5.000 mts de altura, el tipo de entrepelo es liviano y cálido y les permite sobrevivir a las gélidas temperaturas de su ambiente. Son animales migratorios, vivien entre Mongolia y el Tibet. Los nómadas cazaban los antílopes, y se proveía de todo (carne, huesos, cuernos y pieles),  se necesitan varios Chirús para fabricar un solo shatush.

Ya que los nómadas no sabían utilizar el entrepelo suave de los animales, pero los tejedores de Cachemira si, y con la experiencia de utilizar la lana de cachemere para tejer las pashminas, son capaces de tejer chales de una calidad exquisita.

Cuando los ingleses ocupaban la India, se dieron cuenta del valor de estas lanas, shatoosh, pashminas, shaminas, y las exportaron a todo el mundo. Pronto el antílope se conviritió en una especie amenazada y ya no está permitido el comercio de shatoosh, sólo los puedes encontrar en colecciones antiguas de los indios, o de segunda mano.

Tener una buena lana, es como tener una joya, a mi me lo enseñó una amiga mia enamorada de la India y que entiende muchisimo de esto y me lo contó con tanta ilusión que me trasmitió su pasión por una buena pashmima o por un shatoo, que es un privilegio tener uno.

Bueno espero que os haya gustado, los pinchos de EL AMOR DE MADRE  buenisimos, los sacan a partir de la una, una y media y te puedes poner morado. Un beso. Hasta el próximo post, ya he superado las 4.000 visitas gracias por ayudarme.

1 comentario:

  1. Cristina genial el post!!. Es cierto que todo lo que lleva lana y seda en la composición tiene un aspecto y un tacto especial. Me has hecho pensar en una tienda que seguro conoces, Piluca Osaba. Hoy día libre, me apunto al "Amor de Madre". No dejes de escribir.

    Un abrazo.

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