lunes, 7 de marzo de 2016

8 DE MARZO




El 8 de Marzo es el Día Internacional de la mujer, no es un día cualquiera, ni es un día que se hayan inventado las grandes superficies para que alguien regale a alguien algo para demostrar un sentimiento.

Las mujeres de todo el mundo, diferentes en color, educación, situación social o cultural, se unen desde hace más de noventa años luchando por la igualdad sobre todo entre hombres y mujeres, aunque añadamos motivos como justicia, paz y desarrollo, que son motivos más que suficientes para luchar todas, por qué será que seguimos uniéndonos para ser iguales que los hombre,  será por algo, será porque no lo hemos conseguido todavía?

El primer acuerdo internacional firmado en 1945 en Naciones Unidas, para firmar el principio de igualdad entre hombres y mujeres da que pensar, pues no hace tanto que se firmó ese acuerdo. 


Y para no aburriros, con fechas, acontecimientos, mujeres valientes, que pelearon y siguen peleando por esa igualdad, mujeres que consiguieron que votáramos igual que los hombres, mujeres que han conseguido cuota de partido para gobernar, que ahí estoy yo un poco en desacuerdo, porque si somos iguales, que gobiernen los mejores, y dejémonos de cuotas. Seguimos con las palmaditas en la espalda a las mujeres, para que no protestemos más, porque somos un poco "histéricas", y nos tenemos que calamar. Pero eso lo dejaremos para otro post.

Fechas y momentos históricos de grandes mujeres, que pelearon por lo que ahora tenemos, y que son verdaderas heroínas que podría relatar, copiando desde Google, y hacer un resumen tremendamente aburrido, pero no hoy voy a seguir escribiendo el artículo que tenía pensado.

Mi linea es decir lo que pienso, sin que me importe mucho, pero aún me importa lo que piensen los demás, buscando siempre el refuerzo positivo, de lo estás haciendo bien, y a todo el mundo no le gusta lo que piensas, ni como lo cuentas, y menos como lo escribes. Porque eso es imposible, pero si creo en lo que escribo, y es lo único que importa, hacer las cosas que crees que estás haciendo bien.

Pues si hasta 1945 no se nos reconoció la igualdad entre hombres y mujeres la ONU, no nos queda tela para conseguirla, pero no seamos pesimistas, ya hemos conseguido mucho, pero falta, y no es un alegato a favor de las mujeres y en contra de los hombres. Va dirigido a ambos lados, a que nosotras nos espabilemos un poco más y a que vosotros admitáis que aún hay que corregir cosas.


En lo que me quiero centrar hoy, y para poder celebrar el Día Internacional de la Mujer, es que el cuento de princesas que me contaron, no pienso, ni de broma contárselo a mi hija. Ese cuento que me contaron los de mi alrededor, amigos, enemigos, familia, padres, casi incluso mi madre, aunque a ella le costaba más creérselo y por supuesto si no te lo crees no eres convincente.


Ese cuento de que como la niña es buena, es espabilada, no nos da ningún problema, y además es "guapa", se casará bien. Tenemos suerte, si quiere estudiar, que estudie, si quiere ir a la universidad que vaya, pero la mejor universidad será la de casarse con un buen hombre, ejem un buen hombre, no solo es un buen hombre. Un buen hombre o un buen chico, que sonaba mejor, había estudiado una carrera, tenia un buen trabajo, era de una familia "conocida", no me jodas, conocida: si nos conocíamos todos, y nuestra niña será feliz, tendrá hijos, y  nosotros nietos y ... Y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Vaya mierda de cuento, cuando tu príncipe azul, cambia de color, y se va al lado oscuro, cuando siendo princesa te tenías que levantar antes que el príncipe, organizar a los principitos y dejarlo todo listo para irnos a trabajar. El príncipe tras una buena ducha, y un desayuno tranquilo, y tu desquiciada de los nervios porque no cuadraban los horarios. Y el guión del cuento se iba fastidiando cada día más.

Pero como te había dicho una y millones de veces, que eso no se hace, que eso no se dice y que eso no se toca, aunque no llegaras a todo, y cada vez estabas más de los nervios, había que ser una madre, esposa y amiga ejemplar.

Los niños perfectos, que eso se me daba muy bien y me gustaba, a pesar de echarle más horas que el día tenía, el príncipe azul contento, tanto en su trabajo, como si de mi dependiera, como bien comido, que siempre había un pero, y saliendo en mi defensa no cocino nada más y luego bien... como que la princesa tras un día duro no muy duro de trabajo, tenia ganas de romanticismo, bueno tampoco era romanticismo, era yo me quedo bien, y si a ti te gusta o no... tampoco me importa. Y tu mirando el techo, y haciendo listas imaginarias de la agenda del dia siguiente.

Y todos debéis estar pensando porque habla del pasado. Pues porque mañana, casi hoy, es el Dia Internacional de la Mujer, que persigue que se le trate igual que al hombre. Ya quisiera yo que me hubieran tratado igual que traté yo al mal nombrado "hombre" o mi "Príncipe azul", porque en mi época teníamos solo un príncipe.




Pues el príncipe, como he dicho antes, no fue tan azul, y la princesa acabó hasta las narices de su príncipe y de las hermanas de su príncipe que eran como las hermanastras de cenicienta Anastasia y Drizella. Y en su último baile, se escapó a las 11:30, no esperó a su carroza, y días después no se dejó probar nunca más unos "stiletos" negros de Louboutin, con suela roja, por supuesto, porque hacen un daño que te "cagas".



Tal vez, limpio más chimeneas que nunca, tengo menos tiempo para mi que nunca, no voy ni a pilates ni a yoga, ni masajes, ni LPG, ni puedo hacerme la manicura y pedicura tantas veces como antes. Ni siguiera a día de hoy estoy agobiada con la operación biquini, porque este año probablemente, no me lo podré poner, o si, porque los del años pasado y antepasado no me cabes, pero hay más tallas.




Porque cada vez me gusto más yo, y me importa menos lo que piensen los Príncipes Azules. Y sin ellos, sobre todo los falsos, se vive muy bien. Por eso este año yo celebraré con más ilusión que nunca el Dia Internacional de la Mujer.

Ahí queda dicho. Sin Príncipe Azul, sin tacones, sin corona, ni traje de noche ni guantes blancos hasta el codo, sin carroza, y sin hermanastras, pero con mis hijos y muy muy cansada, pero mucho más feliz.

Y colorín colorado este cuento se ha acabado, o no.



Porque ahí chicos, tenéis mucho que decir, y que aportar, si queréis que el Dia Internacional del Hombre, 19 de Noviembre. sea tan importante como el nuestro, igualar nuestra vida. Ser realmente Príncipes Azules, las labores de la casa son de los dos, los hijos son de los dos, las fiestas de cumpleaños son de los dos, no solo es de vosotros acompañar a los niños al fútbol y nosotras a las niñas a ballet, a vosotros también os puede doler la cabeza, y ummm!!!!  esa barriguita cervecera...

Adiooos, porque hoy seguro que alguien me pone verde.


4 comentarios:

  1. No basta con pedir la igualdad, hay que "ejercerla" Enhorabuena por tu blog, Cristina

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  2. Es ideal compartir la vida con una pareja . Para uno solo el camino se hace más duro. Los que te conocemos desde hace años sabemos que tienes fuerza para eso y para más. Un beso

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  3. Sin pareja también se llega a ser feliz. Mi pareja son mi hijo y mi hija. Una buena parejita.

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