Alber Elbaz diseñador de Lanvin, debuta en la cosmética a manos de Lancôme, haciendo una colección limitada de máscaras de pestañas y sombras de ojos. Los ojos que dibuja Alber Elbaz transmiten tristeza y felicidad.
Alber Elbaz se define como triste, hipocondriaco y tímido. Es un diseñador con mucho sentido del humor, en esta época tan brutal necesitamos un poco de diversión y es lo que el pretende con esta nueva colección junto a Lancôme.
Alber Elbaz nació en Casablanca, emigró a Israel con su familia a los 8 meses de edad, . En 1985 se trasladó a Nueva York trabajando para diferentes fabricantes de moda. En 1997 le contrató Guy Laroche, en una época que la casa era conservadora y mediocre, el consiguió actualizarla. Al año siguiente se fue a Saint-Laurent, convirtiéndose en Jefe de Diseño cuando Saint-Laurent se retiró. Pero hubo lío, y eso no pasó, cuando Saint-Laurent pasó al grupo Gucci y Tom Ford se encargó de YSL Rive Gauche, despidió a Elbaz, y este se fue a Italia a trabajar con Krizia. En 2001 fue nombrado director artístico de Lanvin.
La colección que lanza Alber Elbaz con Lancôme es una edición limitada, y Lancôme clasifica al diseñador como el que más talento tiene, con un sentido del lujo, visión de feminidad y toque impertinente que encajan perfectamente en la firma.
Dice que la moda es el único espacio en el que se siente cómodo, no sabría hacer nada más. Tamibién comenta que odia la sensación de que todo lo nuevo y joven es cool. Es más odia la palabra cool. Un día paseando por Rio de Janeiro y creyendo en la perfección y la belleza, se dió cuenta de que cada uno es como es, se le vació la cabeza de cuerpos espectaculares, pensó que hay mucha gente sin complejos, y sigue comentando que la libertad de nuestras mentes es lo que crea la belleza. Es bueno que gente que se dedica a la moda, y se rodea de cuerpos perfectos piense así. Vamos por buen camino. Un beso.
Palma, a 25 de Junio de 2.013
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